El hormigón armado, a diferencia de los otros tipos de construcción (tradicional de mampostería de ladrillos, de placas prefabricadas de hormigón) permite resolver en una única estructura y para cualquier tipo de suelo, cualquier forma y dimensión de piscina. Esto resulta fundamental a la hora de adaptar la piscina al entorno existente y a las condiciones de suelo reinantes en la zona (arenosos, expansivos, rocosos, etc.). Seguramente usted conoce alguna referencia de personas que han tenido problemas de rajaduras y/o fisuras en sus piscinas. Esto se debe a que los diferentes materiales utilizados en la construcción en los otros sistemas constructivos ante diferentes temperaturas presentan contracciones y dilataciones diferentes, permitiendo que se produzcan las fisuras (por ejemplo, en el invierno santafesino resulta habitual tener temperaturas cercanas a 0° en invierno y sobre 40° en verano). El sistema de construcción de hormigón armado resuelve ese inconveniente sin necesariamente agregar costo a la construcción. Es simplemente un mejor método constructivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario